Feromonas.
Capítulo 2
Púrpura aroma de cuerdas en al aire despliegas, Tus alas, casi invisibles de brillos paralizadores, late, el agujero en ondas de río, ritmo de tu caminar certero y a la vez inseguro, inconfundible, lúdico en son de flores. Viento que se detiene al aroma púrpura de las cuerdas de tu cabello, tus ojos, virtuosos de amor, vergüenza de los aíres de primavera que se neutralizan en tu aura de mármol, blando al olor de mi corazón. Tus ojos enmielados aplacan mi cuerpo al percatarse de mi sigilo, y flotas, flotas en aire de hojas en follaje otoñal que despliega aroma de soledad, de un tiempo pasado, ahora tus hojas caen y puede que renazcan de nuevo de cenizas primaverales, tiempos de luz y sombra. Perfecta y audaz cubrirás tus mejillas del frío que despliegas, y cederás al púrpura de mis letras que se fundirán en tu piel prohibida.
Púrpura aroma de cuerdas en al aire despliegas, Tus alas, casi invisibles de brillos paralizadores, late, el agujero en ondas de río, ritmo de tu caminar certero y a la vez inseguro, inconfundible, lúdico en son de flores. Viento que se detiene al aroma púrpura de las cuerdas de tu cabello, tus ojos, virtuosos de amor, vergüenza de los aíres de primavera que se neutralizan en tu aura de mármol, blando al olor de mi corazón. Tus ojos enmielados aplacan mi cuerpo al percatarse de mi sigilo, y flotas, flotas en aire de hojas en follaje otoñal que despliega aroma de soledad, de un tiempo pasado, ahora tus hojas caen y puede que renazcan de nuevo de cenizas primaverales, tiempos de luz y sombra. Perfecta y audaz cubrirás tus mejillas del frío que despliegas, y cederás al púrpura de mis letras que se fundirán en tu piel prohibida.
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